s se entiende que, “la investigación del cerebro es relevante para la psicología y la educación en la medida en que ayuda a los psicólogos y a los educadores a entender mejor el aprendizaje, el desarrollo y la motivación.” (2011). Basándome en esto yo puedo asegurar que, el estudio del cerebro es fundamental para poder entender los procesos de enseñanza aprendizaje que se dan en los estudiantes, además, la neurociencia como ciencia que estudia el cerebro interviene de forma directa en el aprendizaje, es por esto que Schunk en su investigación indica que existen 5 prácticas de aprendizajes basadas en está, las cuales son:
A continuación, veremos brevemente en que se basan cada uno de estos.
Aprendizaje basado en problemas.
El aprendizaje basado en problemas es un método de aprendizaje efectivo que involucra a los alumnos y los ayuda a mantenerse motivados. Cuando los estudiantes trabajan en grupos, también pueden mejorar sus habilidades de aprendizaje cooperativo. El aprendizaje basado en problemas requiere que los alumnos piensen creativamente y manejen su conocimiento de una manera única. Esto es especialmente útil para proyectos que no tienen una solución adecuada. Schunk, (2012), pág. 64.
Respecto a esto Jensen (2005), indica que, “la eficacia del aprendizaje basado en problemas tiene sustento en la investigación del cerebro y que, con sus múltiples conexiones, el cerebro humano está diseñado para resolver problemas”.
Simulaciones y juegos de roles.
La simulación y el juego de roles ofrecen muchos de los mismos beneficios que el aprendizaje basado en problemas. La simulación se puede realizar por computadora en aulas regulares o en entornos especiales como museos. El juego de roles es una lección de demostración en la que los estudiantes se observan unos a otros. Tanto la simulación como el juego de roles brindan a los estudiantes oportunidades excepcionales de aprendizaje. Estos métodos aumentan la motivación y la atención de los estudiantes, al mismo tiempo que los involucra emocional y positivamente con el material. En conjunto, estos beneficios facilitan el aprendizaje. Schunk, (2012), pág. 66.
Discusiones activas.
Muchos temas se utilizan para organizar debates entre los estudiantes. Los estudiantes que participan en la discusión están obligados a participar, no pueden ser observadores pasivos. Este mayor nivel de compromiso cognitivo y emocional conduce a un mejor aprendizaje. Además, al participar en discusiones, los estudiantes están expuestos a nuevas ideas que luego incorporan a su pensamiento. Esta actividad cognitiva ayuda a construir conexiones sinápticas y nuevas formas de usar la información. Schunk, (2012), pág. 66.
Gráficas.
En este sentido Wolfe (2001), expresa que, “el cuerpo humano está estructurado de tal forma que obtiene más información a través de la vista que de los otros sentidos.”
Basándose en esto Schunk en su estudio sobre las “teorías del aprendizaje” (2012), sugiere que:
Las presentaciones visuales ayudan a fomentar la concentración, el aprendizaje y la memorización. Los resultados de estudios cerebrales confirman los beneficios de los gráficos. Los profesores que utilizan gráficos en la enseñanza y piden a los alumnos que los utilicen (por ejemplo, para información general, diapositivas de PowerPoint, presentaciones, dibujos, mapas conceptuales, organizadores gráficos) para que los alumnos se beneficien del procesamiento de la información visual y mejoren su aprendizaje. pág. 67.
Atmósfera positiva.
En la sección emocional, encontramos que el aprendizaje es más efectivo cuando los alumnos tienen una actitud positiva y se sienten emocionalmente seguros. Por el contrario, el aprendizaje será difícil cuando los alumnos estén estresados o preocupados, por ejemplo, cuando estén asustados, deberán reaccionar activamente porque el profesor se enojará si se equivocan. Las creencias positivas de los estudiantes sobre sí mismos y su entorno son fundamentales para un aprendizaje eficaz. La investigación cerebral confirma que el compromiso emocional puede tener un efecto positivo en el aprendizaje y la formación de conexiones sinápticas. Los maestros que crean una atmósfera positiva en el salón de clases tienen menos probabilidades de tener problemas de comportamiento y los estudiantes están más comprometidos con su aprendizaje. Schunk, (2012), pág. 67.
Reflexión
¿Cuál práctica o actividad funciona mejor desde mi punto de vista?
La ciencia y la investigación del cerebro (neurociencia) respaldan muchas prácticas educativas que tienen un impacto positivo en el aprendizaje. Desde mi perspectiva cada practica es sumamente importante e intervienen de manera positiva en el proceso de enseñanza-aprendizaje, y es que sin duda alguna la neurociencia influye de manera efectiva en el aprendizaje de los estudiantes, no obstante, desde mi punto de vista la mejor practica o actividad es el “aprendizaje basado en problemas”, el por qué es bastante simple, el aprendizaje basado en problemas ayuda a los alumnos a encontrar soluciones basadas en problemas determinados, esto es bastante importante ya que promueve el autoaprendizaje, la investigación y los cuestionamientos, sin embargo, esta práctica docente no se limita solo a esto, ya que desarrolla el aprendizaje colaborativo entre cada uno de los estudiantes. Además, esta actividad es bastante útil pues sirve para aumentar la motivación en el aula, la creatividad y el desarrollo emocional de los alumnos.
Respecto a esto vemos el siguiente ejemplo:
El profesor Martínez tiene una clase con 30 estudiantes, está trabajando costos y porcentajes, así que decide separar a la clase en 3 grupos, cada uno con un total de 10 personas. El profesor Martínez decide aplicar el tema de la siguiente manera: “cada grupo deberá tomar una zona del país (sureste, suroeste y norte), y ver que cantidad de personas tienen acceso a la canasta básica familiar.”
Este es un claro ejemplo de un aprendizaje basado en problemas, para poder dar con la respuesta los estudiantes del grupo del profesor Martínez desarrollaran varios cuestionamientos para poder resolver el problema, preguntas como: ¿Cuál es el ingreso familiar de la zona correspondiente?, ¿Cuál es el costo promedio de la canasta familiar de la zona proporcionada?, ¿Cuál es el salario mínimo? Y demás preguntas que los llevaran a un proceso de investigación grupal para poder desarrollar ese trabajo.
Este tipo de practica convierte a los alumnos en entes activos, además permite a los alumnos captar la información proporcionada de manera más dinámica y los aprendizajes obtenidos en esta práctica son para toda la vida. Claro está que, debemos recordar que cada practica expuesta en este trabajo es importante, ya que estas buscan promover el aprendizaje de los estudiantes a través de la neurociencia.
Bibliografía
Schunk, D. (2012). Neurociencia del aprendizaje. En Mónica Vega Pérez (Ed.), Teorías del Aprendizaje: Una Perspectiva Educativa (6ta ed., pp. 64-67). Pearson Educación de México, S.A. de C.V.
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